Carmen Machi, una de las actrices más queridas de la televisión española, ha hablado por primera vez con total claridad sobre su salida de la serie Aída. En el pódcast La Pija y la Quinqui, la actriz confesó que su decisión, aunque difícil, marcó un antes y un después en su vida y carrera. La ansiedad y su deseo de explorar nuevos horizontes profesionales fueron los principales motivos que la llevaron a abandonar la serie, que llevaba su nombre y era un éxito rotundo.

Durante la entrevista, Carmen recordó un momento crucial al inicio de una nueva temporada: «Según entré al rodaje, me dio un vómito de llanto y empecé a ponerme rara. Ese mismo día subí a hablar con producción y les dije que me pasaba algo. Pensé que tenía que irme», relató con sinceridad. Este episodio, sumado a la presión de encabezar un proyecto tan popular, confirmó que necesitaba un cambio.

La actriz explicó que «dejar Aída fue mi primer gran ‘no’ profesional», una decisión que, aunque complicada, la ayudó a superar problemas de ansiedad y fobia social. «Era una serie de muchísimo éxito y el personaje daba título a la serie. Pero yo necesitaba hacer otras cosas y respetarme a mí misma», añadió, subrayando el impacto positivo que tuvo en su bienestar personal.

Su salida no fue inmediata, ya que se coordinó con guionistas y producción para preparar el final de su personaje. «Trastocas muchas cosas y hay que preparar una salida», comentó. Sin embargo, abandonar la serie fue una liberación que marcó un punto de inflexión en su trayectoria. «No sabes la liberación que es decir ‘no’. Ese ‘no’ primero me quitó mucha ansiedad y fobia social que tenía», afirmó.

Pese a los riesgos de abandonar un proyecto en pleno auge, Carmen aseguró que no le faltaron oportunidades laborales tras su decisión. «Es verdad que no dejó de aparecer trabajo», reconoció. A pesar de la incertidumbre inicial, su compromiso con su bienestar personal y profesional resultó ser acertado.

Aída, que se convirtió en un fenómeno televisivo, le otorgó una fama difícil de igualar, pero su salida evidenció su valentía y capacidad para priorizar su salud emocional. «Me respeté a mí misma», concluyó, inspirando a muchos con su relato de superación y autovaloración.