Denzel Washington se encuentra en plena actualidad por el estreno de Gladiator II, una de las películas más esperadas de este año, y en la que da vida a Macrino. El actor estadounidense, de 69 años, forma parte del reparto principal, que estas semanas concede entrevistas para promocionar el filme. En una de ellas, ha hablado de su historial con el alcohol y las drogas. En diciembre cumple 70 años y una década de sobriedad, aunque las secuelas están ahí.

El ganador de dos premios Oscar explica en una entrevista con Esquire que hubo una época en la que sobrepasó el límite con los excesos, aunque, afortunadamente, consiguió parar. «Ya veremos. He estado limpio. (…). La vida está ahora entrando en una nueva etapa para mí. O sea, es tener 70 años. Esto va así. Y me parece bien», explica, lamentándose por «el daño» que aquellas decisiones hicieron sobre su «cuerpo».

Washington se enfrenta, dice, «al último capítulo» de su existencia. «Si me quedan unos treinta años, ¿qué es lo que quiero hacer? Mi madre llegó a los 97. Y yo lo estoy haciendo lo mejor que puedo», apunta, profundizando en uno de sus primeros vicios: el vino. «Es muy traicionero. Va muy lento. No es como, boom, de repente [estás borracho]», dice. Y puntualiza: «Porque nunca me enganché a la heroína y nunca me enganché a la cocaína ni nada de drogas duras. Me inyecté como muchos otros, pero nunca fui un adicto».

«Aprendí a apreciar la calidad. Decía: ‘Me voy a beber mis [vinos cosecha del] 61 y 82 y todo lo que tengamos'». El vino era lo mío, y me vi abriendo botellas de 4.000 dólares únicamente porque era lo que quedaba en la casa», se sincera. Con el tiempo pasó a reducir la ingesta de vino: «Me puse el límite en dos botellas y me bebía ambas a lo largo del día».

«Me abstuve siempre mientras trabajaba o me preparaba [para un papel]. Me limpiaba por dentro y volvía al trabajo; podía hacer ambas cosas. Por muchos meses que pasaran de rodaje, bang, era el momento de alejarse de aquello. Pero [terminaban y] entonces, boom: tres meses de vino y luego de vuelta al trabajo», sentencia el también director.